Con motivo del intento de golpe en Turquía, perpetrado en la noche del viernes al sábado, el presidente Rosen Plévneliev declaró que Turquía es un buen vecino y un socio estratégico de Bulgaria, y la estabilidad, la paz y el respeto de los derechos humanos en aquel país son de importancia fundamental. “Condenamos toda forma de violencia y apoyamos a las instituciones democráticamente elegidas en Turquía”, dijo, además, el Jefe de Estado. Por su parte, el primer ministro, Boyko Borísov, señaló que la única forma democrática de destituir a cualquier autoridad son las elecciones y que “la violencia sólo conduce a más violencia”.
Mientras, el Ministerio de Exteriores de Bulgaria pidió a los ciudadanos búlgaros que cancelen sus viajes a Turquía, apelando también que nuestros compatriotas que estén allí permanezcan en sus hoteles y otros alojamientos, y que eviten los lugares públicos.