Centenares de personas se reunieron para un día de playa organizado en las cercanías de la costa vigilada de Rósenets, provincia de Burgás, que se encuentra junto a la lujosa residencia de Ahmed Dogán, presidente honorífico del Movimiento pro Derechos y Libertades. Más de cinco mil simpatizantes de dicho Movimiento se congregaron a su vez en la verja del palacete, apoyando al ex líder político. El grupo, llegado a la playa por iniciativa de Sí a Bulgaria, lleva varias horas sin ser admitido al territorio costero, que es propiedad estatal−pública, y se encuentra acordonado por la Policía. Se ha llegado a momentos de tensión y enfrentamientos con la Policía, como resultado de lo cual fue arrestado Ivailo Mírchev, activista de Sí a Bulgaria, y varios uniformados sufrieron daños. El alcalde de Burgás, Dimítar Nikolov, calificó de “error” el no habérsele permitido el acceso a la propiedad privada a quienes participan en las protestas. Según la información más reciente, parte de esas personas serán llevadas a la playa por un camino de rodeo.