Ivaylo Kalfin, del grupo de la Alianza Progresistade Socialistasy Demócratas, fue escogido para representar el Parlamento Europeo en el recién creado grupo de alto nivel para los recursos propios de la Unión Europea. Es un reconocimiento por su profesionalidad  y una prueba de confianza de que goza no solo en su grupo parlamentario. La participación de Kalfin en el Grupo de sabios presenta una oportunidad de que Bulgaria contribuya en un asunto muy importante y difícil que es la reforma del presupuesto de la Unión Europea. El grupo de alto nivel será dirigido por el ex comisario europeo y primer ministro de Italia, Mario Monti, y tendrá tres representantes de las tres instituciones más importantes: la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeos. Aparte de Ivaylo Kalfin, el Parlamento Europeo es representado por el líder del grupo parlamentario de los liberales Guy Verhofstadt, ex premier de Bélgica, y por el presidente de la Comisión Presupuestaria del Parlamento Alain Lamassoure,del grupo del Partido Popular Europeo. La comisión será representada por tres eurocomisarios: MarosSefcovic, Yanush Levandovski,  Algirdas Semeta. Tres ex ministros de Finanzasson de la cuota delConsejo de la UE. El propósito del grupo es estudiar las maneras de financiar el presupuesto de la UE y proponer mejoras para hacer el sistema más transparente y de mayor responsabilidad democrática.

“La idea es que cuando el presupuesto europeo sea aprobado, se repartan los gastos, a diferencia de los presupuestos nacionales”, explica Kalfin. “Los ingresos se definen por los países miembros. De este modo, en vez de las prioridades y las políticas europeas, el tema central en los parlamentos nacionales es la cuota para pagar. Además, en el curso de los años se han acumulado muchas excepciones de la regla general y nadie puede dar una explicación sensata de los factores que definen la cuota nacional. Primero deben suprimirse las concesiones en el presupuesto europeo. El hecho de que Reino Unido no paga la suma total de su cuota significa que todos los demás países, Bulgaria incluida, pagan más. Disfrutan de estos privilegios Alemania, Suecia y en el último presupuesto, también Dinamarca entre otros. Cada país miembro debe saber qué cantidad de dinero deposita y cuánto recibe. Hace falta que una gran parte de los ingresos del presupuesto europeo se asignen directamente a él sin pasar por los presupuestos nacionales. Esto puede realizarse mediante una parte del IVA o el impuesto sobre las transacciones financieras que once países ya se han comprometido a implementar. Así podremos volver a la conversación sobre las prioridades políticas y el valor añadido de Europa”, comenta Kalfin que era el relator del Parlamento Europeo para el presupuesto plurianual de la Unión Europea, 2014 – 2020.

Kalfin está convencido de que estas ideas serán de utilidad para nuestro país.

“Bulgaria es un país que recibe mucho más de lo que deposita en el presupuesto europeo”, prosigue Ivaylo Kalfin. “El 4% de la economía búlgara proviene de fondos europeos. Así que los búlgaros tenemos interés que el presupuesto europeo se financie con recursos propios en vez de cuotas a través de los presupuestos nacionales para limitar la influencia de los gobiernos de los países donantes que se empeñan en reducir sus gastos. La autonomía del presupuesto para países como Bulgaria significa seguridad, previsibilidad y oportunidad de discutir políticas mediante las cuales la Unión Europea puede ayudar al país”.

Se espera que el grupo Monti presente sus primeras conclusiones a finales de 2014. En 2016 tiene que proponer cambios que se consultarán con los parlamentos nacionales de los países miembros antes de introducirlos en las leyes europeas. La idea es proponer variantes para atraer la atención y la participación de los parlamentos y los gobiernos nacionales, y cambiar el sistema actual. Los “sabios europeos” tendrán que acometer la difícil tarea de proponer reformasrealistasy factibles. Los países miembros a veces tienen opiniones diametralmente opuestas sobre asuntos relacionados con los recursos propios de la UE. Muchos de ellos temen perder su soberanía, si aumentan los recursos propios de la Unión y de esta manera ésta será financieramente más independiente de las capitales nacionales. Es alentador que los participantes en el Grupo de sabios hayan pasado por muchas batallas con éxito y han demostrado que saben llegar a un consenso con varios partidos políticos de los países miembros y entre las instituciones más importantes de Europa.

Versión en español por Ekaterina Bobeva