En Bulgaria hay medio millón de armas registradas: de combate, de caza y de gas. No importa si son de caza, de defensa propia o coleccionables, la policía ha empezado a tomar medidas más rigurosas y los fiscales buscan irregularidades en las licencias. Resulta que el Ministerio del Interior controla las armas, pero no a la gente armada. Según datos del Ministerio del Interior, 124 mil búlgaros poseen pistolas de gas. La opinión de los expertos es que estas armas son seguras. Mucho mayor es el número de las armas de fuego y las escopetas de caza. Más de 350 mil armas diferentes están en las manos de 250 mil de personas. La diferencia en los números se debe al hecho de que una persona puede poseer más de un arma. Sirve de consuelo que más de la mitad de estas personas son cazadores. Los demás poseen armas para la defensa propia. La mayoría de ellos son militares retirados, policías y empleados de los servicios de seguridad. Apenas 50 mil son las personas comunes y corrientes que tienen armas de combate para la defensa personal. Las empresas de seguridad y vigilancia han registrado unas 40 mil armas, así que cada guardaespaldas cuenta con más de dos pistolas.
Bulgaria ocupa el lugar 88 en cuanto al número de armas per cápita. En Bulgaria, seis de cada cien personas tienen pistola o escopeta. En la vecina Serbia los poseedores de armas de fuego son diez veces más, lo que la coloca en el segundo lugar de honor después de los EE.UU. En Francia, Alemania y Austria, las personas que poseen armas de fuego son cinco veces más que los búlgaros con armas registradas.
¿Teme usted por la vida de su familia, quiere ser cazador o es apasionado coleccionista de armas? No es fácil adquirir un arma de fuego, pero luego no hay control. Esto se hizo claro después de un incidente en el que murió un policía de las fuerzas especiales. A causa de las discrepancias entre las instituciones, el Ministerio del Interior controla las armas, pero no a sus propietarios. Al mismo tiempo, tenemos leyes severas que quedan solo en papel. Después de obtener los necesarios documentos médicos, que en Bulgaria es algo que se hace proforma, uno recibe la licencia del Ministerio del Interior y luego nadie controla qué hace uno con su arma. Un nuevo caso de homicidio volvió a servir de motivo para introducir medidas más rigurosas que afectarían a los vendedores de armas, los cazadores y los concienzudos propietarios de pistolas. Los expertos comentan que la ley que está en vigor desde el 2010 es buena y consistente con la legislación europea. Uno puede adquirir una pistola o escopeta en cuatro casos: para la defensa propia, para la caza, con fines deportivos y como premio.
La policía comenzó a negarse a expedir licencias y los fiscales empezaron inspecciones por orden de la Fiscalía General. Se revisan los documentos de todos los ciudadanos propietarios de armas. Se elaborará una lista completa de los búlgaros que tienen licencias de armas de fuego, como también del tipo y el número de las armas, porque sin control sobre los propietarios no se puede realizar control sobre las armas. Está previsto que las inspecciones terminen el 25 de abril.
Versión en español por Ekaterina Bobeva
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