La mejor forma de que Bulgaria pueda atraer a turistas extranjeros es desarrollando su turismo cultural, de SPA y de montaña. El Estado apostará en los tradicionales centros turísticos en la costa, como también en productos secundarios como el turismo religioso, el enológico y el ecológico. Es lo que prevé la Estrategia de Desarrollo del Turismo hasta el 2030, aprobada por el Gobierno.

La ambición es afirmar este país como un destino turístico durante todo el año. Se espera que hacia 2020, Bulgaria acoja a 9 millones de turistas extranjeros anualmente. Los expertos pronostican que 10 años más tarde su número crecerá hasta 12 millones. Según los estudios, los ingresos del sector turístico aumentarán en un 40%.

El año pasado, la industria turística aportó al PIB 6.000 millones de euros. El mayor número de turistas que visitan Bulgaria provienen de Rumania, en segundo lugar están los griegos, después vienen los alemanes, seguidos por los turistas de Rusia. Los jóvenes británicos siguen optando por pasar sus vacaciones de verano en Bulgaria debido a que las bebidas alcoholicas son baratas y a los turistas ucranianos les gusta Bulgaria por los muchos días de sol y las bellas playas.

La estrategia prevé mejorar la calidad de los servicios y aumentar la cualificación de los empleados. Hace falta una campaña publicitaria agresiva para atraer la atención sobre los lugares de interés cultural y las maravillas búlgaras. El Gabinete ha destinado 5 millones de euros para popularizar los productos turísticos búlgaros en el extranjero. Nuestro país dispone de 209 playas, más de 600 fuentes minerales, 400 lagos alpinos.

En lo tocante al turismo cultural, los turistas extranjeros pueden visitar 11 lugares de interés incluidos en la lista de la UNESCO, como también 160 monasterios y más de 330 museos. Los extranjeros escogen a Bulgaria porque es un destino barato. Un turista extranjero paga un promedio de 80 euros para alojamiento. Los turistas rusos que prefieren la costa pasan una decena de días pagando más de 130 euros por noche. Los turistas turcos y griegos visitan Bulgaria principalmente por los centros de esquí. Los turistas más pretendidos son los aficionados al golf. Según los expertos, pagan hasta 600 euros solo por alojamiento durante tres días. Los más adinerados y más aficionados a este deporte pueden gastar hasta 4-5 mil euros por su corta estancia

La industria turística búlgara tiene que adaptarse a las tendencias internacionales, según las cuales, el mayor flujo de turistas a Europa proviene de las repúblicas asiáticas. En las próximas dos décadas la clase media y los ingresos en esa parte del mundo crecerán. Bulgaria puede encantar a esos visitantes con su folclore, sus costumbres y artesanías, como también con sus modernos centros de SPA con fuentes termales.

Versión en español por Ekaterina Bobeva