“Abrazad las ideas de Stamboliiski (destacado líder político de la historia moderna de Bulgaria) y tomad conciencia de la relevancia de este momento histórico en que Bulgaria y el pueblo búlgaro están al umbral de una vida nueva. Organizad os en asociaciones locales y estructurad una Unión Agraria Popular Búlgara, caracterizada por la unidad y el talante creador. Construyamos un Frente de la Patria fuerte, basado en organizaciones agrarias fuertes”.

Son palabras del líder agrario Nicola Petkov, que él pronunciara en el discurso radiado por Radio Sofía el 13 de septiembre de 1944, pocos días después del golpe de Estado pro soviético perpetrado en el país.

Las actuaciones conjuntas de los comunistas y los agrarios, iniciadas al formar la coalición llamada Frente de la Patria, acabaron muy pronto, a mediados del año siguiente (1945), cuando Nikola Petkov fue separado del gobierno del Frente de la Patria. En señal de solidaridad con él, abandonaron aquel gabinete todos ministros pertenecientes al partido agrario.

En la primavera de 1946 el primer gobierno del Frente de la Patria dimitió tras fracasar en las negociaciones con la oposición. Stalin ordenó a Jorge Dimitrov (político búlgaro, secretario general de la Internacional Comunista desde 1935 hasta 1943, y líder del Partido Comunista Búlgaro) hacer caso omiso de la oposición y aplastarla.

Los procesos contra ésta comenzaron en el verano de ese mismo año 1946. La primera sentencia fue dictada contra el destacado líder agrario G. M. Dimitrov, condenado a cadena perpetua, no obstante que ya había abandonado el país. Fue sentenciado a cinco años de prisión también Krastiu Pastujov, por dos artículos que publicara.

En octubre de 1946 la oposición acusó al gobierno del Frente de la Patria de no asegurar condiciones para unas elecciones libres. En el país habían proliferado diversos grupos terroristas que obstaculizaban las reuniones convocadas por la oposición o las disipaban, y mataban a los líderes opositores.

A ello se refiere Mijail Mijailov, activista de la Unión Popular Agraria Búlgara, en un registro que guarda la Fonoteca de Radio Bulgaria, hecho en el año 1990.

“Las elecciones se celebraron en el contexto de mucha violencia, falsificaciones y terror. En el día de la votación, en el diario Narodno Zemedelsko Zname (Bandera popular agraria) fueron publicadas las esquelas de 24 miembros del partido que habían actuado como defensores de candidatos agrarios o como miembros de colegios electorales. No obstante las falsificaciones y el terror, la Unión Agraria Popular Búlgara obtuvo 1 millón 300 mil votos. Este número incluía también los votos a la Oposición Unida, no muchos por cierto. Fueron ganados 101 escaños. En la Asamblea Nacional se desencadenó una verdadera pugna en torno a la legislación y al programa que se debían hacer realidad tras las elecciones, y en especial en torno a la nueva Carta Magna del país, la llamada constitución Dimitroviana (por el nombre del líder comunista Jorge Dimitrov). La Unión Popular Agraria Búlgara propuso un programa propio para la nueva Constitución”.

A finales de 1947, el líder de la oposición parlamentaria, Nikola Petkov, rechazó el proyecto de Constitución del Frente de la Patria. La finalidad era evitar la aprobación de una Carta Magna de modelo soviético y el establecimiento de un sistema totalitario. El proyecto de la Carta Magna presentado por la oposición se apoyaba en los principios del parlamentarismo y la garantía de los derechos humanos fundamentales. Sin embargo, la mayoría parlamentaria liderada por el Partido Comunista Búlgaro lo rechazó tajantemente.

El 5 de junio de 1947, la Magna Asamblea Nacional retiró el fuero parlamentario a Nikola Petkov, quien fue detenido de inmediato, en la propia Sala Plenaria, e imputado de preparar un golpe de Estado con ayuda de organizaciones militares. Fue montado un proceso y dictada sentencia de pena capital contra el líder del mayor partido opositor. Fue un duro golpe para toda la Unión Agraria Popular Búlgara. Pocos días después de dictada esta sentencia fue presentado en el Parlamento y aprobado un proyecto de ley por la que la Unión Agraria Popular Búlgara era declarada ilegal.

“El pogromo contra la Unión Agraria Popular Búlgara comenzó en el momento en que los comunistas vieron que esta unión no estaba dispuesta, ni siquiera después de la visita de Vishinski a Bulgaria, a aceptar el dictado de Moscú… Stalin en persona, a través de su verdugo Vishinski, decidió liquidar a la Unión Agraria Popular Búlgara. Todo el mundo conoce la verdad: Nikola Petkov fue ahorcado al cabo de un proceso judicial montado. El partido que había liderado fue desmantelado por una ley especial, y sus dirigentes y cuadros más activos fueron desterrados en campos de concentración o encarcelados. La Unión Agraria dio miles de víctimas en aras de la democracia que hoy todos procuramos imponer como una salida de la crisis que está viviendo el país”, decía Mijail Mijailov en 1990 en una entrevista sobre los sucesos en el país en 1947 que concedió a Radio Nacional de Bulgaria, guardada en la Fonoteca de esta emisora,

Tras la firma del Tratado de Paz de París, a comienzos de 1947, la oposición acariciaba la esperanza de que, al retirarse las tropas soviéticas del territorio de Bulgaria, la situación mejoraría. Sin embargo, sucedió todo lo contrario. Con la doctrina Truman, EE UU modificó su estrategia en los Balcanes sustituyéndola por la “no intervención” a cambio de concesiones de parte de la URSS en Europa Occidental.

Mientras tanto, por instrucciones recibidas de Moscú, Bulgaria se negó a participar en el llamado Plan Marshall, el plan más importante de Estados Unidos para la reconstrucción de los países europeos después de la Segunda Guerra Mundial, que a la vez estaba destinado a contener un posible avance del comunismo.

Tres días después del 9 de septiembre, al entrar en vigor el Tratado de Paz con Bulgaria, la Corte Suprema de Casación confirmó la sentencia a muerte dictada contra Nikola Petkov. El líder agrario fue ahorcado en la Prisión Central de Sofía el 23 de ese mismo mes. El 15 de enero de 1990 esta sentencia fue revocada por el Tribunal Supremo de Bulgaria  y Nikola Petkov fue rehabilitado.

Versión en español por Raina Petkova