En 1986, al cabo de tres años de rodaje, tuvo lugar el estreno de la serie de la TV Nacional de Bulgaria Vasco da Gama de la aldea de Rupcha. Su director, Dimítar Petrov, ya se había merecido la fama de gran maestro en el trabajo con niños como actores no profesionales. El comienzo de este su trabajo fue marcado por la película El capitán, seguida por obras emblemáticas del cine infantil búlgaro como Los erizos nacen sin púas, Con niños en la playa, Un perro en la gaveta.
En la mayoría de estas obras el director Dimitar Petrov colabora con el tándem de los escritores Moriz Yomtov y Marko Stoichev, conocidos bajo el seudónimo de Hermanos Mormarev (Bratia Mormarevi), a quienes la vida juntó por primera vez en el lejano año 1956 en el Departamento de Programas para el Exterior de Radio Nacional de Bulgaria (la actual Radio Bulgaria). Moriz llevaba años trabajando en esta casa, mientras que Marko acababa de entrar en la emisora, y este era su primer empleo.
En la mayoría de estas obras el director colabora con el tándem de los escritores Moriz Yómtov y Marko Stóychev, conocidos bajo el seudónimo de Hermanos Mormárev (Bratia Mormárevi), a quienes la vida juntó por primera vez en el lejano año 1956 en el Departamento de Programas para el Exterior de Radio Nacional de Bulgaria (la actual Radio Bulgaria). Moriz llevaba años trabajando en esta casa, mientras que Marko acababa de entrar en la emisora, y este era su primer empleo. En un comienzo, los dos no se proponían escribir ni sobre, ni para los niños. “Siempre nos habían interesado los problemas de actualidad y como humoristas siempre habíamos pretendido identificar y hacer constar los fenómenos cómicos de la vida, hasta que un día nos percatamos de que el punto de vista infantil era muy idóneo para este fin”, comentaron los dos años más tarde. Era muy cómoda la posibilidad de expresar, si bien alegóricamente y a través de la temática infantil, las verdades amargas sobre los aspectos sombríos del modo de vida “socialista” ensalzado por la propaganda comunista. Por ejemplo, la práctica de alentar y fomentar, ya desde el banquillo escolar, el servilismo bajo la forma de conducta ejemplar, o bien los contactos nada desinteresados de los padres con funcionarios del Partido Comunista con el afán de garantizar la matrícula del hijo en un colegio bilingüe de élite…Todo esto es lo que esperaba en un futuro a los personajes de la serie televisiva Vasco da Gama de la aldea de Rupcha: Vasco, Zheña, Fori y sus compañeros de clase del Séptimo B de una escuela de la ciudad marítima de Varna. Antes, sin embargo, les tocaba disfrutar de un inolvidable verano lleno de travesuras, apuestas infantiles, infatigables rivalidades asociadas a los tormentos del crecimiento, la pubertad y las primeras emociones de lo que más tarde conocerían como el amor.
Vasco es un muchacho travieso y listo. Su padre es marinero (concretamente contramaestre), y su mamá está preñada con un tercer hijo. El propio Vasco es muy inteligente y bastante astuto. Recorre las calles de Varna acompañado de su amigo Zheña y no deja de competir y rivalizar con Fori por la benevolencia de la niña Tíncheto.
Zheña es un regordete, hijo de un director de orquesta. Su papá es una de sus mayores desgracias porque con frecuencia le “amonesta” con la batuta. Además de comer mucho, Zheña gusta de pasear con Vasco y beber coraje de él para las travesuras.
El argumento gira en torno a un bote desfondado que Vasco y Zheña descubrieron en la playa y decidieron reparar. A tal efecto necesitaban dinero y el único capaz de proporcionárselo es Fori, el rival de Vasco. Las paces entre los muchachos duraron justo el tiempo preciso para echar el bote al agua y experimentar la mayor de las decepciones al verlo hundirse por el agua que lo llenaba al penetrar por el sinfín de brechas en el fondo… Luego la enemistad y rivalidad entre los tres vuelven a arder.
He aquí un fragmento del diálogo entre Vasko y Zheña en el momento en que encontraron el bote en la playa. Es un registro que guarda el Fondo Sonoro de Radio Nacional de Bulgaria.
“-¿Qué crees que podríamos hacer con él?
-Lo primero, arreglarlo y pintarlo. Ya sé lo estás pensando: “Ése ha vuelto a perder la cabeza”.
- Ni se me ha ocurrido pensarlo, pero la verdad es que este bote es una ruina y repararlo no sería rentable.
- Tú con tu eterno pesimismo. Ya verás, puede que incluso le montemos un motor…
- Tío, ¿cuánto cuesta reparar un bote?
- Pásame aquella tabla. Sujétala así y aprieta…¿De quién es el bote?
- De un tío de mi amigo.
- Pues que venga el tío para que lo negociemos.
- Pero cuánto costaría más o menos.
- Como poco, doscientas levas y de ahí para arriba podría llegar hasta las trescientas…
- Se lo diremos.
- Eh, tú, deja la tabla. ¿Qué te has creído?
- Pero si yo solo quería ver cuánto pesa…
- Bueno, no importa. Al menos hemos visto cómo se hace ese trabajo.”
Para que la historia se enrede a más no poder, el regordete Zheña decide escapar de su hogar. Para no estar solo en esta protesta contra el prepotente papá director de orquesta, sugiere a Vasco que los dos levanten anclas juntos y en secreto. En el barco Elena trabajan el padre del uno y el hermano del otro. Sin embargo, en el momento decisivo, el temor se apodera de Zheña. Entonces Vasco, con la maleta en una mano y con la guitarra de su amigo en la otra, sube sigilosamente al barco, y éste se hace a la mar. La aventura del chaval tiene buen fin, aunque no el que Vasco había planeado. Luego… termina el verano y con la llegada del otoño comienza el nuevo año escolar. Vasco, Zheña y Fori vuelven al colegio y las vivencias estivales se convierten en un hermoso recuerdo.
La serie Vasco da Gama de la aldea de Rupcha ofreció el primer papel protagónico a Iván Laskin quien a la sazón estudiaba en la Escuela Media Número 7 de Sofía. A causa del rodaje, durante dos años y medio casi ni cruzó el umbral de la escuela, provocando la franca envidia de sus compañeros de clase. Es el único de los muchos niños que participaron en la teleserie, que continuó su carrera en el teatro y en el cine y se afirmó como uno de los actores más solicitados hoy en día, no obstante su carácter áspero.
El papel de Fori fue confiado a Gueorgui Márkov, quien años más tarde se graduaría por la Academia Nacional de Arte Teatral y Cinematográfico en la especialidad de camarografía, y hoy es un solicitado camara, fotógrafo y director de videoclips musicales.
Versión en español por Daniela Radíchkova
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