Pliska, la capital del Primer reino búlgaro, es residencia principal de nuestros soberanos por más de dos siglos. Esta Reserva Nacional Histórico-Arqueológica, que conserva restos del pasado glorioso del país, está a sólo dos kilómetros de la actual ciudad del mismo nombre. En 2014 en ésta fue inaugurada la Residencia del Arte PLISKART construida por la fundación homónima. En la nueva sala de conciertos, los días 10 y 11 de octubre se celebrará la primera edición del Festival Musical de Otoño.
La impulsora de este acontecimiento es Veneziela Náydenova, natural de Varna y educanda de la Escuela Media de Música “Dobri Jrístov” de esta ciudad en la costa búlgara del mar Negro. Más tarde continuó sus estudios en la Facultad de Teoría Musical del Conservatorio de Sofía. Desde 1991 reside y trabaja en Suiza enseñando piano en el Conservatorio de Neuchâtel. Discípulos suyos son laureados en concursos regionales e internacionales. La propia Veneziela Náydenova a menudo es mimbro del jurado en concursos instrumentales y corales. Participa en conciertos de cámara, tiene una activa carrera concertista como conductora –se dedica a la dirección coral y orquestal de obras de ópera– escribe, hace arreglos y se ocupa de orquestar música para diferentes conjuntos. Desde 2003 es directora artística del festival Saison Musique au choeur (Temporada Música coral), y desde 2008 es presidenta de la misma Asociación.
Pliska dista una treintena de kilómetros de la ciudad de Shumen y menos de 70, de Varna. Veneziela Náydenova está convencida de que este sitio histórico no está lejos de cualquier punto del planeta, por eso desde hace años está considerando cómo darlo a conocer fuera de las fronteras de Bulgaria.
Siempre llevo a Bulgaria en mi pensamiento – dice –. Hace cinco años creé la Fundación PLISKART con la idea de organizar eventos culturales. No me pondré a razonar qué es lo que es Pliska para todos los búlgaros, sin embargo, éste es un nombre que es desconocido en el extranjero. Quisiera contribuir a su promoción. Mis abuelos son de Pliska y cuando heredé su casa decidí hacer un centro cultural. Hemos construido una sala de cámara, para conciertos, en la que se desarrollará el Festival. Estamos en octubre, la naturaleza cambia de tonos y nosotros queremos incorporar el nuestro a este colorido ramo otoñal. Esperamos deleitar al público con la bella música de cámara escogida por los artistas. El concierto del 10 de octubre es del Cuarteto de Cuerda Femenino “Arte”. El programa es muy agradable, incluye obras de Bela Bartók y de Astor Piazzolla, entre otros. El domingo hemos programado dos eventos: un concierto del pianista y director coral y orquestal Stefan Boyadzhíev, que interpretará piezas solistas de Claude Debussy y de Serguey Rajmáninov; en el mismo programa participará también la soprano joven Lilyana Kóndova. El Festival acabará con arias de ópera conocidas y romanzas rusas, presentadas por Gueo Chobánov (bajo), y Janet Benun (piano), que han seleccionado los títulos más populares de su repertorio.
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