Estabilidad, realismo, resultados. En estos términos el titular de Finanzas de Bulgaria, Vladislav Goranov, caracterizaba la filosofía del presupuesto Público para 2016, aprobado en primera lectura:

El Presupuesto 2015 está acorde con la realidad. Es una función de lo que estamos creando y ofrece posibilidades suficientes para que el Estado cumpla sus compromisos en ofrecer amparo social a aquellos de los ciudadanos que no sean capaces de arreglárselas por sí solos, invertir en capital humano, atender los terrenos de la Defensa y la Seguridad, ámbitos en que este país también han de cumplir compromisos internacionales. Se trata del Presupuesto que toma en consideración todas las realidades y necesidades que el Estado tendrá el próximo año y, lo más importante, este presupuesto garantiza estabilidad sobre el telón de fondo de los problemas en derredor nuestro relacionados, no sólo con la seguridad económica, sino también con la seguridad global, manifestó el titular de Finanzas enfatizando que la meta del Presupuesto apunta a reducir el déficit y disipar las dudas de que la deuda pública pueda crecer desproporcionadamente.

El déficit estimado es de unos 900 millones de euros. La nueva deuda que Bulgaria podrá asumir en 2016 es de hasta 2650 millones de euros. En los textos se va actualizando, asimismo, el Presupuesto 2015.

Si en 2012 Bulgaria tenía un déficit presupuestario de apenas un 0,6 % y era uno de los ejemplos mejores en Europa, ahora Bulgaria mantiene el cuarto déficit más alto en la UE, de un 5,8 % del PIB - dice Desislava Nikolova, del Instituto de Economía de Mercado -. En el período de la crisis más grave, años 2009 a 2012, el déficit presupuestario fue inferior en mil millones de euros al que tenemos en el período de 2013 a 2015 .En los tres últimos años, los enormes déficits no están justificados por el entorno económico global.

Un año más, el Instituto de Economía de Mercado ha elaborado su Presupuesto Público alternativo. Según Desislava Nikolova, el proyecto propuesto es de un déficit cero, pero ha sido logrado al precio de severas reformas.

Nuestro objetivo apunta, antes que nada, a reducir los gastos corrientes y los gastos en salarios en el sector presupuestado, en un 10 % - dice Desislava Nikolova -. No se trata de una propuesta nueva, ya que se encontraba recogida en el Presupuesto 2015, promovido por el Ejecutivo. Desgraciadamente el Gobierno ha fracasado en esta su iniciativa.

Según el presupuesto alternativo, 2016 puede concluir con un déficit cero - frente al 25 planeado por el Gobierno -, siempre y cuando, el Ejecutivo adopte una reforma muy seria en el sector de la Justicia y el Interior, desmantele el monopolio de la Caja Sanitaria y racionalice los presupuestos de los Ministerios del Interior y de Defensa.

Este año, por primera vez, hemos examinado con mayor detenimiento el presupuesto del poder judicial y el del Ministerio del Interior - dice Desislava Nikolova -. En lo tocante al poder judicial, Bulgaria es país campeón por el número de fiscales y jueces per cápita. Y qué decir de la enorme administración que es la más numerosa a nivel europeo. Se trata de una descomunal ineficiencia. Hay que pensar en optimizar la repartición de estos enormes recursos.

El Instituto de Economía de Mercado sugiere suprimir impuestos ineficientes como el impuesto “dividendo”, actualmente de un 5 %, el impuesto sobre el “tipo de interés”, ahora de un 8 % y el impuesto sobre los bienes heredados, como también rebajar el impuesto que pagan los comerciantes unipersonales del actual 15 % al 10 %. Según Desislava Nikolova, si se restringen las facilidades tributarias y, concretamente, las facilidades otorgadas a los agricultores y ganaderos, los vouchers para comida y el IVA preferencial para el turismo y se transfiere una quinta parte de los ingresos del impuesto sobre las renta a los municipios, el efecto sobre los ingresos al erario público resultará insignificante, pero se producirán un aumento de la labor empresarial y del consumo, y de ahí se impulsará el crecimiento económico. El Gobierno debe renunciar al aumento planeado de las cotizaciones para la jubilación y, en vez de ello, ha de ir reforzando el papel de los ahorros personales, eliminar la posibilidad de renunciar a los ahorros y transferirlos al sistema solidario. Además, una gestión más acertada de la propiedad pública se podrá lograr al privatizar compañías públicas endeudadas como los Correos de Bulgaria y los Ferrocarriles Estatales de Bulgaria. Según cálculos efectuados por el Instituto de Economía de Mercado, el efecto global de estos cambios será del orden de casi 700 millones de euros, sin incorporar a esta cuantía los ingresos por concepto de privatizaciones. Desde el Instituto de Economía de Mercado señalan que han calculado que en 2016 cada contribuyente deberá pagar una media de 2428 euros. También tenemos deudas del orden de 1850 euros per cápita que habremos de ir pagando en el futuro.

Versión en español por Mijail Mijailov