Para Bulgaria, los cuatro ámbitos básicos en los que se  confeccionarán prioridades con lujo de detalles y se fijarán expedientes legislativos son: “La UE, una unión a favor de los puestos de trabajo, el crecimiento y la competitividad”, “Migración y Seguridad”, ”Unión energética eficiente y política en el terreno del clima” y “La UE en el escenario mundial”. “Las propuestas que hemos hecho se comienzan a debatir ahora con la  “troika” en el marco de la presidencia de que formamos parte también nosotros - precisa en entrevista en exclusiva para Radio Bulgaria, Meglena Kúneva, viceprimera ministra  y coordinadora nacional de los preparativos para la presidencia -. Tendremos que esperar un poco hasta que llegue el momento en que podamos anunciar, en nombre de los 3 países, cuáles serán las prioridades. Existe un tiempo rigurosamente fijado, en el cual, la troika formula las propuestas comunes. En Sofía se organizó la primera reunión entre Gran Bretaña, Estonia y Bulgaria. Hasta julio próximo, tras consultas con el Secretario General del Consejo deberá quedar ultimada la estructura del programa común y fijados los plazos para finalizar este programa. Hasta finales de 2016, los equipos de los tres países deberán precisar el proyecto de un programa común, incluidos los expedientes legislativos y los acontecimientos en torno a los cuales trabajarán las presidencias. Hay que decir que las prioridades son seleccionadas entre las diez que tienen la CE y el PE y, respecto a las cuales, el Consejo también se ha mostrado de acuerdo. De ellas se seleccionan las de mayor utilidad  para la UE”.

Según la viceprimera ministra, Bulgaria se ha posicionado bien en las cuatro esferas  propuestas por este país: “No creo que el sector de Energía, que es muy importante para Bulgaria por ser un país dependiente en este sentido, sea más importante que la oportunidad que podamos dar a los empresarios de emplear tecnologías punta. Esta labor descansa sobre un entorno empresarial adecuado y necesita de personas inteligentes. Si contáramos con las dos cosas, Bulgaria podría agregar a su PIB un valor añadido muy importante. Además, es una labor  que la gente aspira a hacer, es la economía del siglo XXI. Este tema, que para nosotros en el plano social es duro, para la gente que abandona el país, para los salarios, podrá encontrar en las tecnologías punta su lógica respuesta empresarial. La seguridad, la custodia de las fronteras exteriores, el cambio climático son temas que se ajustan en gran medida a los intereses búlgaros. Mencionaré, asimismo, la política de cohesión, que transcurre con la filosofía del marco financiero multianual. Se trata del dinero encauzado a Bulgaria a través de los fondos europeos, es un dinero sumamente importante para el país. Actualmente, nuestros proyectos de infraestructura están siendo materializados, gracias a estos recursos de los fondos europeos”.

Los mandatos de la CE y del PE vencen en 2019. Se espera que el período más intenso en la labor legislativa se produzca entre el año 2018 y el 2019, y a Bulgaria le toca el papel de último país del “trío” - que forma con Estonia y Gran Bretaña - que deberá “cerrar” muchos de los expedientes colocados en la mesa de negociaciones. Esto reclama grandes habilidades y tiene las características de una auténtica competición, en la que importa el número de los expedientes que Bulgaria pueda conseguir cerrar. Cada presidencia al final se congratula con el número de expedientes cerrados.

“Lo que quiero que permanezca tras la presidencia de Bulgaria es que la gente llegue a saber más sobre Bulgaria - señala Meglena Kúneva -. Por otra parte, también nosotros, podremos  conocer más sobre Europa y los procesos en el seno de la UE, porque nos estamos volviendo cada vez más escépticos, partiendo de la expectativa de que alguien desde afuera resolverá nuestros problemas. Para mi será un éxito poder oír, al final de la presidencia búlgara, las valoraciones de diferentes países de que los búlgaros están bien preparados y que saben cómo lograr el consenso”.

Durante la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, Bulgaria afrontará un duro desafío. Si no se celebran elecciones  parlamentarias anticipadas, durante la misma expirará el mandato del actual Gobierno búlgaro y el de la actual legislatura parlamentaria. Conviene recordar que cuando asumió el papel de país presidente del Consejo de la UE en 2010, Bélgica estaba sumida en una crisis política. La presidencia de 6 meses de ese país fue asumida por  un Gabinete interino y fue calificada a su término, de muy exitosa. Esto es un ejemplo de cómo la élite política en un país, no obstante la difícil situación política interna, destierra las discrepancias y distinciones, y logra un  consenso en aras de una meta importante. Con una buena preparación y objetivos claramente anunciados, cabe esperar que la presidencia búlgara del Consejo de la Unión Europea, se coronará de éxito.

Versión en español por Mijail Mijailov