Ya es una tradición que antes del inicio de la temporada turística las autoridades en Bulgaria adopten medidas adicionales de seguridad y tranquilidad de los turistas. Llama la atención que este año el grado de las medidas supera lo normal. 

Ante las embajadas de los países, cuyos turistas suman mayor número en Bulgaria, la ministra del Interior, Rumiana Bachvarova, se ha comprometido con que el número de los policías adicionalmente movilizados sea mayor que en otras ocasiones. Solo en la región del mar Negro, el número de los policías enviados desde otros puntos de Bulgaria ascenderá a 730 y habrá refuerzos no solo para los policías de a pie, sino para los policías investigadores, los trabajadores operativos y otros especialistas. El Ministerio del Turismo promete medidas adicionales para la seguridad, incluso mediante la apertura de un teléfono que trabajará 24 horas donde se podrá informar de todo tipo de irregularidades.

Un día antes de conversar con los diplomáticos, la ministra del Interior anunció en la Asamblea Nacional que se elevarán drásticamente las medidas de seguridad en los aeropuertos en Sofía, Varna y Burgas. Esta medida evidentemente tiene que ver con la advertencia del Departamento de Estado de EEUU de posibles ataques terroristas en Europa durante el verano. No es casual que en su cumplimiento participarán no solo policías, sino también equipos de la unidad de lucha contra el terrorismo, la gendarmería y la policía fronteriza. Hasta el momento, medidas similares se implementaban solo durante las visitas de delegaciones extranjeras, durante vuelos de las líneas aéreas israelíes y después de los atentados en Europa. 

La advertencia del Departamento de Estado se refiere no solo a centros turísticos, sino a los lugares donde tienen lugar eventos multitudinarios, restaurantes, centros comerciales, así como el transporte público. Por esto se puede esperar que las medidas de seguridad se expandan sobre tales sitios con el fin de garantizar un perímetro más amplio de seguridad. Algunos observadores no excluyen que las medidas de seguridad adoptadas para la temporada de verano sean prolongadas después de su término. Esta hipótesis se basa en algunos indicios de que este año las medidas son parte de una acción de mayor envergadura.

Uno de estos indicios es que, poco antes de que fueran anunciadas las medidas del Ministerio del Interior para la temporada de verano, el Gobierno aprobó enmiendas a la Lista de las personas físicas y jurídicas, grupos y organizaciones respecto a los cuales se apliquen las medidas de la Ley de medidas contra el terrorismo. En vigor de las enmiendas, el objeto del procedimiento de castigo ya no son solo las personas que cometen o financian acciones terroristas, sino personas que contratan o entrenan a terroristas, o atraviesan la frontera o se encuentran en el país de modo ilegal para tomar parte en acciones terroristas. A propuesta del fiscal general fue creada una nueva unidad en la lista destinada a personas para las cuales hay suficiente número de datos de que realizan actividad vinculada con terrorismo o financiación de acciones terroristas. En la nueva unidad fueron incluidos El Hadz Hasan y Farah Meliad, los supuestos autores del ataque terrorista en el Aeropuerto de Burgas en 2012 cuando murieron cinco ciudadanos israelíes y un búlgaro. Las medidas de las autoridades mostraron no solo alto grado de compromiso para garantizar la seguridad de los ciudadanos, sino fuerte voluntad de perseguir y castigar a las personas que se han atrevido a violarla.

Versión en español por Hristina Taseva