En la víspera del 140 aniversario de la Liberación de Bulgaria de la dominación otomana, la Cruz Roja Búlgara y la Unidad de la Guardia Nacional organizaron en Sofía un acto de homenaje ante el Monumento a los Doctores. El mismo se encuentra en una zona céntrica de la capital, en el jardín que está detrás de la Biblioteca Nacional “Santos Cirilo y Metodio”, y está dedicado a los médicos y otro personal sanitario que perdieron la vida en el curso de la Guerra Ruso–Turca de 1877 a 1878, libertadora para Bulgaria. Su proyecto es obra del arquitecto ruso Antoniy Tomishko.
El Monumento a los Doctores, nombre que le dieron los búlgaros, fue construido con donaciones en el período de 1883 a 1884. Es una pirámide cuadrangular truncada que se aposenta sobre un amplio pedestal, y coronada con un sarcófago de granito pulido con cruces en relieve elaboradas por el maestro cantero italiano Farabosco. A los cuatro lados del sarcófago se leen los nombres de los campos de batalla donde murió el mayor número de trabajadores sanitarios: el sitio de Pleven, el puerto de montaña de Shipka, la batalla por la ciudad de Plovdiv y la de la aldea de Mechka. Debajo del sarcófago, sobre las piedras que forman la pirámide están tallados los nombres de médicos, técnicos en emergencias, enfermeras y sanitarios; entre ellos, un búlgaro, el Dr. Konstantín Vesenkov, uno de los médicos que integraban los batallones de voluntarios búlgaros. En la base de la pirámide hay una inscripción que reza: “A los rangos médicos caídos en la Guerra Ruso–Turca 1877–1878”.
La ceremonia es un modesto acto de reconocimiento al heroísmo y la memoria de los médicos y otro personal sanitario que murieron por la liberación de Bulgaria. El homenaje empezó con un servicio conmemorativo oficiado por sacerdotes de las Iglesias Ortodoxas Búlgara y Rusa.
La Orquesta Representativa yla Unidad de la Guardia Nacional rindieron los honores militares y montaron guardia de honor frente al monumento de los héroes que, con su actividad humanitaria durante la guerra, crearon las condiciones para el establecimiento de la Cruz Roja en Bulgaria. Durante la ceremonia, el presidente de la Cruz Roja Búlgara, Acad. Jristo Grigorov, señaló:
“Sus Excelencias, queridos amigos, estamos ante un monumento que es símbolo del aprecio y la gratitud del pueblo búlgaro a todos los rangos médicos que dieron su vida por la liberación de Bulgaria, entre ellos rusos, rumanos, ucranianos, polacos y bielorrusos. El monumento fue construido en 1884, y la Cruz Roja Búlgara lo consagró, de acuerdo con los cánones de la Ortodoxia, en 1993. Desde entonces acudimos aquí cada año para expresar nuestro gran reconocimiento. Este monumento tiene, además, otro potencial. Debe transmitir un mensaje a los jóvenes que mañana tomarán el timón de nuestro país para conducirlo al futuro. Este mensaje es ser buenos, ser compasivos y respetar la historia de su patria. Inclinemos la cabeza y rindamos homenaje a los héroes que sacrificaron su vida por Bulgaria. ¡Gloria eterna”!
Asistieron al homenaje diplomáticos, políticos y numerosos ciudadanos para demostrar su reconocimiento y depositar una flor al pie del monumento a los médicos víctimas de la guerra.
Versión en español por Daniela Radíchkova
La demografía tiene un fuerte efecto negativo sobre el crecimiento del PIB después de 2009, con un efecto negativo promedio de alrededor de 0,9 puntos porcentuales por año. Esto representa alrededor del 45% de la tasa de crecimiento anual promedio del..
Abdullah O calan ofrece desde la cárcel negociaciones de paz con el PKK El líder del reconocido grupo insurgente Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdullah Ocalan, quien cumple cadena perpetua, recibió la visita de..
Para que un trabajador pueda mantener y vivir según los estándares búlgaros se necesitan 738 euros al mes. Para una familia de tres miembros, dos adultos y un niño, la suma es de 1.329 euros, según el Instituto de Investigación Social del sindicato KNSB...
"Niño búlgaro yo soy, del verdor de nuestras montañas estoy fascinado; búlgaro llamarme es de mi máximo agrado", escribía con orgullo Iván Vazov,..