Alexander Dimitrov, director ejecutivo de la compañía de telecomunicaciones “A1 Bulgaria” ha sido distinguido con el galardón “Empresario del Año” para 2018 en acto solemne organizado en la sala de conciertos de la Ópera y Ballet de Sofía. El concurso está siendo organizado por la revista “Empresario” y por décimo primer año consecutivo está premiando las mejores prácticas en la gestión empresarial en Bulgaria. El evento suele transcurrir patrocinado por el jefe de Estado y por esto el premio le ha sido entregado al ganador personalmente por Rumen Radev, presidente de Bulgaria. Por reglamento el concurso se desarrolla en tres etapas y este año, al comienzo del mismo fueron nominados 64 altos ejecutivos de 24 sectores de la economía nacional. En la segunda etapa el número de aquéllos quedo reducido a 41 y a la tercera arribaron sólo 10 finalistas, evaluados por sus cualidades personales y por la valoración obtenida por parte de sus empleados y socios.

Los 10 finalistas de la undécima edición del “Empresario del Año” gestionan compañías cuya facturación el año pasado ha rebasado la cuantía de 1250 millones de euros. Las compañías forman parte de los sectores de las telecomunicaciones, los seguros y las finanzas, las tecnologías informáticas, el transporte y la logística.

A la hora de referirme a la Empresa búlgara deseo establecer una nítida distinción, ya que para mí hay dos tipos de negocios. Uno de éstos se centra casi íntegramente en buscar personas adecuadas entre quienes hacen el reparto de recursos públicos y, el otro, en la gestión empresarial eficiente, en las innovaciones y la competitividad. El primero genera injusticia, corrupción, ahoga la calidad, nos aleja del mundo moderno, arrastra hacia abajo a toda la sociedad. El segundo tipo de negocios impulsa el progreso de la economía búlgara, invierte en la formación y capacitación de los empleados y funcionarios, va modernizando gradual e invariablemente Bulgaria y la conduce al liderazgo en Europa. Es éste el tipo de negocios que debemos respaldar como Estado y como sociedad, por igual, ha expresado el jefe de Estado búlgaro en su mensaje a los finalistas en el concurso para 2018.

Alexander Dimitrov, ganador en 2018 de la distinción “Empresario del Año”, lleva 15 años desempeñándose en el sector de las telecomunicaciones pero define la compañía que actualmente dirige como un universo inconmensurable al que tienes que descifrar desde dentro cómo funciona. Además del Gran Premio “Empresario del Año”, Alexander Dimitrov ha recibido el Premio a la Empresa Comprometida Socialmente y de mayor número de innovaciones implantadas en el transcurso del año.

Actualmente, somos la compañía más vigorosa en nuestro sector, gracias al equipo que dirijo. Trabajan en esta compañía 3800 personas, y nuestros clientes suman unos 5 millones, dice Alexander Dimitrov, entrevistado por Radio Bulgaria. El premio se nos ha otorgado asimismo por las innovaciones y las reformas que hemos hecho en nuestra compañía y me alegro de que el jurado las haya notado. El éxito se debe asimismo al hecho de que hemos extendido nuestra labor, hemos hecho gran número de mejoras técnicas y hemos enriquecido los canales de televisión que ofertamos. Hemos implantado el sistema operativo en la nube para el almacenamiento de datos y esto ha sido apreciado por los clientes porque los resultados del actual ejercicio financiero son óptimos. En las personas con las que estructuro mis negocios busco cualidades como la lealtad, el afán de manifestación, la intransigencia. Formamos, con mi equipo, una especie de gran familia, profesamos idénticos valores y siempre nos apoyamos mutuamente en los trances difíciles. Además, nos solemos desafiar unos a otros para seguir adelante. Es lo que estoy buscando también en la nueva gente que viene a incorporarse a nuestra compañía.

Figura en esta “decena de oro” de los empresarios en Bulgaria para 2018 también el alemán Ulrich Heppe, director de los aeropuertos de las ciudades de Varna y Burgas. Es el empresario enviado a Bulgaria por una compañía que opera más de 30 aeropuertos en cuatro continentes. Dice él: Me siento feliz de encontrarme en Bulgaria, aquí las personas son unos profesionales en su trabajo, cuento con colegas excelentes y me alegro de poder disfrutar de una naturaleza tan hermosa. Llegué a Bulgaria hace tres años cuando asumí la responsabilidad de la gestión de los dos aeropuertos citados, que forman parte del grupo Fraport Group. Los aeropuertos de Burgas y Varna son los únicos que tenemos en la hermosa zona costera bílgara del mar. Estamos orgullosos de ellos. Cuento con la oportunidad de viajar a numerosos y diferentes países pero cada vez que retorno a Bulgaria me siento como en casa, dice Ulrich Heppe.

Versión en español por Mijail Mijailov