Los mensajes de Fin de Año de los políticos en Bulgaria suelen ir cargados de declaraciones que infundan a los ciudadanos propensiones positivas. En esta ocasión, empero, han sido distintos en cierta medida. Rumen Radev, presidente de Bulgaria, ha enfatizado en los aspectos negativos de la realidad en 2018, el primer ministro, Boyko Borisov, ha resaltado los aspectos positivos, y la lideresa del opositor Partido Socialista Búlgaro (BSP), Kornelia Ninova, ha deseado un cambio del estatu quo.

Según el jefe de Estado, 2018 ha sido año de escándalos de corruptelas, de una erosión de los derechos y las instituciones democráticos, los problemas no se han solucionado, sino que su solución ha ido siendo pospuesta en el tiempo y ha continuado el retroceso de la ley y la justicia frente a la arbitrariedad. Estas duras palabras representan una crítica virulenta lanzada contra el gobierno de coalición del partido GERB y los Patriotas Unidos, y la salida de la situación el jefe de Estado la está vislumbrando en la unión de los esfuerzos en aras de la justicia, la legalidad, la soberanía y el porvenir ilustrado. Kornelia Ninova, presidenta del BSP, ha deseado que 2019 sea un año de viraje, de decisiones y actuaciones valientes que pongan fin al estatu quo actual y redunden en un cambio a mejor. Se sobreentiende que tanto el jefe de Estado como la directiva de la mayor fuerza opositora en Bulgaria abogan por un cambio político radical por medio de un cambio del gobierno del país. Para 2019 se han previsto elecciones europeas y municipales pero no elecciones parlamentarias nacionales ordinarias.

Volen Siderov, líder del partido nacionalista Ataka ha expresado que en 2019 “dependerá de nosotros si Bulgaria seguirá quedándose sin habitantes para convertirse en un simple territorio o bien se invertirá el rumbo”. El mensaje de Fin de Año del líder nacionalista se centró básicamente en la situación internacional en la que él espera “trastrueques en el mundo, en Europa y, además, en Bulgaria”. Obviamente, Siderov tiene ahora su atención centrada más en las próximas elecciones al Parlamento Europeo. En relación con éstas entre los partidos que integran la coalición de los Patriotas Unidos existen fricciones. Así, el líder del partido Ataka pretende ser cabeza de lista de la citada coalición de cara a las elecciones europeas pero sus socios de los partidos VMRO y el Frente Nacional por la Salvación de Bulgaria, Krasimir Karakachanov y Valeri Simeonov, respectivamente, tienen ideas distintas sobre el tema. Hace un par de meses, Siderov advirtió que si en las elecciones europeas el partido GERB y los Patriotas Unidos no llegaban a obtener resultados mejores que el BSP y el Movimiento por Derechos y Libertades, en Bulgaria se celebrarían elecciones parlamentarias anticipadas.

El Movimiento por Derechos y Libertades es una fuerza política opositora que, no obstante, se abstiene de dirigir críticas a la gestión del país. Tras destacar que 2019 trae nuevos retos y oportunidades nuevas para Bulgaria y para Europa, Mustafa Karadayi, líder de este movimiento, ha pedido “hacer juntos los cambios que tracen el camino mejor para nuestra patria”. Este tono, un tanto más diferente, no es indicio de pasividad, sino que muestra un distanciamiento de posturas extremas y una atenta observación de la situación política con vistas a que el Movimiento por Derechos y Libertades pueda recuperar eventualmente su papel de partido equilibrador en la vida política de Bulgaria.

Al verse blanco de los críticas del jefe de Estado, de una parte de la oposición e incluso, aunque parcialmente, del pequeño socio de la coalición gobernante, Boyko Borisov, primer ministro de Bulgaria, ha optado por dirigir un mensaje de Fin de Año ponderado y de tono positivo. En el plano exterior, el primer ministro ha enfatizado en la participación activa de Bulgaria en los debates sobre migración de la UE, en los esfuerzos de este país con vistas a la incorporación a la UE de los Balcanes Occidentales y en el Brexit. En el plano interno se ha referido al Presupuesto Público de un monto récord, al crecimiento del PIB y a la subida de las pensiones y los sueldos que continuará en 2019. Todo parece indicar que serán éstos los acentos también en la campaña preelectoral del gobernante partido GERB en los próximos meses.

Las distinciones que se han vuelto patentes en los mensajes de Fin de Año de los políticos búlgaros, vienen siendo notorias desde hace años, pero el énfasis puesto en ellas en la víspera del nuevo año traduce la intención de ir atizando las pasiones electorales en 2019.

Versión en español por Mijail Mijailov