Ya es un hecho el primer número de la revista “Vivir Bulgaria” para 2019. Las personas tentadas por el folclore, los oficios tradicionales y la indumentaria tradicional de Bulgaria volverán a tener la oportunidad de pasarse horas agradables leyendo esta publicación bilingüe profusamente ilustrada.

Se trata de una revista moderna y contemporánea sobre la vida y cultura tradicionales, publicada en búlgaro e inglés, dice la editora Svetlana Radeva.

La revista debe ser una sorpresa para los lectores. Presentamos el conjunto folclórico nacional “Filip Kutev”. Ofrecemos una entrevista con Elena Kúteva, directora del conjunto e hija del destacado compositor búlgaro, Filip Kutev, y con una de las solistas, Sorina Bogomilova. Constituyen el tema central de este número de la revista los Juegos de Mascarada.

Este artículo ha sido redactado por especialistas en el tema Tsvetana Manova, con fotos de autor muy hermosas que no proceden del festival “Surva” de la ciudad de Pernik, sino de los festejos organizados tradicionalmente en las aldeas de la región de Pernik, los días 13 y 14 de enero. La prenda bordada que presentamos en esta ocasión es el chaleco moderno con trenzas, propuesto por Miglena Terzieva, modista de Targovishte. El material va acompañado de un videoclip subido al sitio electrónico y la página en Facebook de la revista. También presentamos el Museo Regional de Historia de Targoviste.

El museo viene funcionando desde el año 1960 como institución autónoma que se dedica a estudiar y promocionar la historia de la región de Targovishte. Se guardan en el mismo más de 25 mil muestras del período desde el Neolítico hasta la época moderna, por entre las cuales la más famosa es la del tesoro de oro de Kralevo. Fue descubierto en 1979 en el sepulcro de un noble aristócrata de alto rango, quien había vivido en el siglo III a. C. Integran el tesoro 47 aplicaciones de oro con esmalte, placas de oro con imágenes de grifones, medallones con la efigie de Heracles, aretes, brazaletes, adornos de jaez de caballo.

Targovishte es la ciudad natal de Svetlana Radeva y el número actual de la revista ”Vivir Bulgaria” es una reverencia peculiar que la editora hace a las tradiciones y la cultura que le han legado sus ancestros. Es también natural de esa región la etnóloga que ha abordado los juegos de la infancia de las abuelas y los abuelos, otro tema curioso en las páginas de la revista.

Este escrito ha sido fruto de muchos años de trabajo que ha hecho la etnóloga Ivelina Velcheva del Museo de Historia de Popovo. El tema es muy extenso y por esto lo iremos presentando en dos o tres números seguidos. Ivelina fue recorriendo durante años numerosas aldeas recogiendo testimonios de mujeres ancianas que le contaron cómo eran aquellos juegos infantiles.

También ha encontrado su puesto en las páginas de la revista la rica colección de trajes típicos de la doctora Vanya Vekova de Berlín.

Es muy importante el interés por los bordados búlgaros, en los últimos años están de moda, dice Svetlana Radeva . El curso de bordado búlgaro que ofrecimos en el segundo número de la revista lo había preparado yo pero contando, sobre todo, con los contactos con el resto de mis colegas que trabajan en este campo. No es casual el que en este número hayamos publicado fragmentos de” Símbolos, signos y esquemas en el bordado tradicional búlgaro”, libro escrito por Stefka Mijailova de la ciudad de Kiustendil. Es que todo lo que hacen los estudiosos en este terreno debe llegar a un mayor número de personas de cualquier edad.

El equipo de la revista “Vivir Bulgaria” opina categórico que una parte muy importante de los trajes tradicionales está siendo guardada por la población y que la mayoría de estas prendas resultan poco conocidas incluso por los trabajadores museísticos. ”Por esta razón, hemos convocado a través de este número de la revista el concurso “Los trajes tradicionales que lucían mi abuela y mi abuelo”. Esperamos poder recibir fotos de esas prendas de vestir acompañadas de una descripción de su historia”, concluye Svetlana Radeva.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Cortesía de Svetalna Radeva