Debido a la falta de consenso público, el ministro búlgaro de Sanidad, Kíril Ananiev, ha revocado la orden de uso obligatorio de mascarillas protectoras en espacios públicos abiertos y cerrados. “Sin embargo, recomendamos usar las mascarillas diariamente al salir de casa. Usar la mascarilla es una oportunidad para evitar la introducción de medidas restrictivas más severas”, ha comentado el Ministro. El Ejecutivo ha prometido comprar un millón de mascarillas protectoras para ciudadanos socialmente desfavorecidos y para quienes no tienen la posibilidad de adquirirlas en tiendas y farmacias. “Hemos acordado el envío de dos millones de mascarillas de China y esperamos que lleguen en una semana”, ha agregado el ministro Ananiev.