La prohibición provisional decretada sobre la entrada en Bulgaria de pasajeros y vehículos de pasaje, a través de los puestos fronterizos con Turquía, quedó revocada en la medianoche del domingo al lunes. La restricción fue decretada por la parte búlgara el 24 de abril, primer día del Ramadán, el mes sagrado para los musulmanes, y se proponía frenar la circulación de autobuses y turismos de Turquía hacia Bulgaria al comienzo de los días festivos. Cuando unos días atrás, la ministra búlgara de Exteriores, Ekaterina Zajárieva, discutió con su homólogo turco Mevlut Cavusoglu la implantación de las medidas temporales, Zajárieva advirtió que incluso tras la supresión de la prohibición los ciudadanos que  viajaran entre Bulgaria y Turquí serían sometidos a cuarentena en cada uno de los dos países cada vez que cruzaran la frontera.