Los adolescentes búlgaros ocupan los primeros puestos en tabaquismo, ingesta de alcohol y uso de cannabis y se sitúan en el segundo lugar por el comienzo precoz de su vida sexual. Estos datos alarmante han sido hechos públicos recientemente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su informa titulado ”En el foco: La salud y la prosperidad de los adolescentes”. El estudio de la OMS ha abarcado 45 países y se suele efectuar cada cuatro años con menores de 11 a 15 años de edad.
“La tendencia no deja de ahondarse, y los niveles de uso y abuso de alcohol se han duplicado en comparación con el estudio anterior −destaca el doctor Mijail Okolíyski, representante de la OMS en Bulgaria− . Uno de los datos más impactantes es que en Bulgaria son las chicas quienes fuman más que los chicos, un hecho que no se registra en ningún otro país. Esto hace peligrar la capacidad reproductiva de las mujeres y es una señal de alarma para el cuadro demográfico de Bulgaria”.
¿Cuáles son los otros hechos que despiertan la preocupación de los expertos? Ingieren bebidas alcohólicas de manera regular un 28,9% de los estudiantes, y este porcentaje arroja un notable aumento frente al año 2014, cuando este porcentaje era del 16,4%. En términos de consumo de cannabis, Bulgaria ocupa el primer puesto con un 19% en los chicos que se fuman porros y un 16% de las chicas que lo hacen. Tienen experiencia sexual un 37% de los chicos quinceañeros y un 25% de las chicas de la misma edad.
”En Bulgaria es cada vez más baja la edad a la que los jóvenes comienzan a probar o hacer uso de sustancias psicotrópicas, alcohol y cigarrillos. Son fumadores un 9% de los menores de 11 años de edad, un 26% de los chicos adolescentes y un 38% de las chicas –comenta la Dra. Radosveta Stámenkova de la Asociación de Planificación Familiar− . Es igualmente un resultado preocupante del estudio recogido en el informe el que los alumnos búlgaros ocupen el último puesto por el índice de apoyo que sienten recibir por parte de sus progenitores. En función del género y la edad, el nivel de esta percepción de respaldo varía entre el 32% y el 46%”.
Los expertos vislumbran soluciones a estos problemas en la labor activa de prevención y en la divulgación de información relativa a la salud redactada en un lenguaje comprensible. Es indispensable mantener informados a los jóvenes y que éstos puedan conversar sobre temas que les preocupen. El Dr. Okolíyski explica el problema que genera la cultura sanitaria todavía insuficiente y deficitaria en Bulgaria en los siguientes términos:
”Lo que ocurre es que los padres no obtuvieron una educación sanitaria cuando iban a la escuela y así una buena parte de ellos no son conscientes de los riesgos que entraña para sus hijos recurrir prematuramente al alcohol y los cigarrillos. De este modo, muy a menudo, no procuran proteger a sus vástagos, e incluso si lo hacen, ignoran cómo han de actuar. Hay que iniciar la educación sanitaria lo más temprano posible e insistir en los riesgos que asumen los menores de edad para que éstos los eviten conscientemente”.
El cuadro de los comportamientos de riesgo muestra un conjunto de hábitos insanos de los adolescentes búlgaros, señala Lidia Vasíleva, organizadora del estudio en Bulgaria. A su juicio, la salud psíquica también es un problema grave. Los adolescentes búlgaros se quejan muy a menudo de nerviosismo, irritación y cefaleas. El consumo diario de productos y bebidas refrescantes dulces también arrastra a los adolescentes búlgaros a la cabeza de las clasificaciones negativas. Apenas un 20%, aproximadamente, de los adolescentes mantiene una actividad física diaria suficiente, se indica, además, en el informe de la OMS.
Se han empleado artículos de Radio Vidin, emisora regional de Radio Nacional de Bulgaria.
Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: BTA
"Niño búlgaro yo soy, del verdor de nuestras montañas estoy fascinado; búlgaro llamarme es de mi máximo agrado", escribía con orgullo Iván Vazov, el patriarca de la literatura búlgara, en Bulgaria tras la Liberación en 1878. Hoy, un..
Los búlgaros de Besarabia son una parte “indisoluble del cuerpo búlgaro, de la comunidad búlgara espiritual y cultural. Persistirán ya que el lazo entre ellos y nosotros es inquebrantable”, se señala en el único número del periódico Besarabia búlgara..
La vida de los búlgaros en la República Checa es muy ajetreada. Trabajan en masa en distintas fábricas, el trabajo es por turnos, el cansancio se acumula y la gente no quiere viajar a la capital un domingo sólo para poder votar. Así explica Irena..
"Niño búlgaro yo soy, del verdor de nuestras montañas estoy fascinado; búlgaro llamarme es de mi máximo agrado", escribía con orgullo Iván Vazov,..