La dimisión del presidente del Gobierno Boyko Borisov bajo la presión de las protestas en la calle que continúan ya 17 días, sería una mala variante, considera Rosen Plévneliev, ex presidente de Bulgaria. En tal caso, el actual Jefe de Estado, Rumen Radev, formaría un gabinete de marionetas en un intento de abonar el suelo para la manipulación de las futuras elecciones con papeletas falsas. La variante razonable, según Plévneliev, es que Radev se ponga a trabajar como presidente de todos los búlgaros y junto con los manifestantes que protestan, los sindicatos y las figuras públicas de reconocido prestigio traten de buscar solución para una Bulgaria más justa. “El gran problema es la sensación de injusticia, pero también la falta de un verdadero Jefe de Estado”, comenta el ex presidente, porque según él Rumen Radev viola la Constitución del país pidiendo la dimisión del fiscal general.
En una reunión en el parlamento, en presencia de las direcciones de los partidos, la coalición GERB-CDC y el partido DPS-Nuevo Comienzo acordaron un mandato completo para gobernar y cumplir con los compromisos para la orientación euroatlántica de Bulgaria...
Los socios de la coalición se reunieron esta mañana temprano en la Asamblea Nacional para debatir una posible reformulación del Gobierno. El líder del GERB, Boyko Borisov, mencionó la posibilidad de un cambio hace una semana, después de que su partido..
La tensión social entre el 1 de julio y el 30 de septiembre de este año se mide con un índice de 6,09, lo que indica “riesgos difíciles de controlar” en una escala de diez puntos, según un estudio de la agencia sociológica Myara, informó la agencia BTA...