"La gente tiene derecho a protestar, pero es inaceptable bloquear toda la ciudad", ha manifestado en entrevista con la televisora bTV Ekaterina Zajárieva, ministra búlgara de Asuntos Exteriores. Respecto a la vigésima primera jornada de las protestas en la capital de Bulgaria y el corte de algunos de los cruces de la ciudad, la Ministra ha manifestado que Bulgaria es un país democrático y que toda persona tiene derecho a protestar, pero que son inaceptables los bloqueos y los intentos de arrestos cívicos. A juicio de Zajárieva, la sociedad civil es uno de los correctivos importantes del poder, pero la gente en la calle es ya de un número muy inferior al registrado al comienzo de las protestas. "Es irresponsable reclamar dimisiones seis meses antes de celebrarse las elecciones parlamentarias ordinarias. La democracia se traduce en elecciones que se celebran cada cuatro años", ha zanjado la ministra Zajárieva.
La inestabilidad global hace que la ambición que tiene Bulgaria desde hace largos años de adherirse a la eurozona sea más relevante y más urgente que nunca, ha afirmado en en Londres el gobernador del Banco Nacional de Bulgaria (BNB), Dimitar Radev, durante..
Un debate nacional sobre el tema Acceso al mercado laboral de trabajadores de terceros países: retos y soluciones se desarrollará hoy en Sofía. El evento se organiza por la Cámara de Industrias de Bulgaria y la Junta Nacional de Turismo, con el..
Sol y chubascos por la tarde, las temperaturas se mantienen bajas para la época El martes, las temperaturas mínimas serán de unos 8 °C a 12 °C. En Sofía capital rondarán los 8 °C. Durante el día predominará el tiempo soleado. Por la tarde, en..
El Gobierno asignará 7.7 millones de euros adicionales junto con el subsidio para el transporte público en Sofía. Lo anterior ha sido acordado hoy..
A partir del 20 de mayo se restablece el funcionamiento del transporte urbano en Sofía. Es lo que ha declarado ante periodistas Todor Kapitanov, vice..
Durante su visita a Japón, el presidente Rumen Radev se ha reunido con el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, en Tokio. Ambos firmaron una declaración..