En el centro de protección de la naturaleza y los animales en la ciudad de Dobrich no solo los grandes osos, sino los mapaches Pizho, Penda y Santino ya han hibernado. Los tres mapaches han adoptado la forma de una bola para protegerse mejor del frío. Con la bajada de las temperaturas su metabolismo se ralentiza y se les puede ver comiendo una vez a la semana, como mucho. Santino debe bajar de peso, señala el director del centro Hristian Hristov. El mapache ha logrado adelgazar hasta los 17 kilos, partiendo de 21 kilos, gracias a una dieta de remolacha, pescado, frutas y verduras. Entrará en forma apenas cuando alcance 12 kilogramos. En estos momentos está durmiendo en un cajón bajo un toldo donde hace calor y no hay humedad. Le acompañan en la hibernación dos hembras. Durante una vacunación de los mapaches fue comprobado que uno de ellos erróneamente fue calificado como varón y le fue dado el nombre de Pizho. A pesar de esto lo conservará.