Bulgaria se mantiene en el fondo de la clasificación europea de terrenos de agricultura biológica, indican los datos de Eurostat. Según las estadísticas, en los últimos cuatro años las tierras que se utilizan para producción biológica han disminuido en un 27%. Por detrás de Bulgaria en la clasificación hay solo tres países: Irlanda, Malta e Islandia. Según la Fundación Biocelena, los problemas en el sector han sido provocados por decisiones erróneas, escasa financiación y deficiente gestión, informa reportera de Radio Nacional.

A pesar de esto, los expertos esperan que el descenso drástico de las tierras de producción biológica se deba al abandono del sector de empresas que han iniciado esta actividad solo por cobrar subsidios europeos.