Las nociones que se tienen en Bulgaria sobre el noroeste del país a menudo se asocian con imágenes de ruina y pobreza. Tras el fracaso del sistema totalitario y el decaimiento del agro, muchas personas se vieron forzadas a abandonar esa región de Bulgaria en busca de su sustento y una vida más digna. Otras procuraron encontrar una solución e invertir sus capacidades y esfuerzos en algo constructivo.

Hace ya más de seis años, un grupo de jóvenes entusiastas sentó los cimientos de la Sociedad de Soporte Lógico de Vratsa. Esta asociación se propone ofrecer por medio de una formación de calidad a un mayor número de personas de Vratsa la oportunidad de conseguir empleo bien retribuido en el dinámico sector las tecnologías de la información (TI) sin abandonar su terruño. A tal efecto, los especialistas en soporte lógico diseñan cursos de programación para estudiantes, desempleados y trabajadores, para que se preparen para una carrera en el sector de las TI. El equipo de jóvenes se siente orgulloso de que en todos esos años más de una treintena de personas, que se formaron en estos cursos, se hayan quedado a trabajar en el sector TI en Vratsa.

”Comenzamos por un curso de programación, sumamos otro, de mercadotecnia digital, también tenemos un curso de diseño −dice Emilián Kadíyski, uno de los fundadores de la Sociedad de Soporte Lógico de Vratsa− . Se trata de profesiones que se pueden ejercer desde Vratsa para clientes del mundo entero. En la época actual lo que importa es lo que uno sabe y puede hacer, no dónde se encuentre localizado. Al menos en la industria digital es así. Distamos mucho de estar logrando un cambio a nivel de ciudad, pero somos un ejemplo positivo. Estoy contento de seguir acá. Mi familia está aquí, veo la ventaja que hay frente a una gran urbe”.

En 2018, los integrantes de la Sociedad de Soporte Lógico fueron distinguidos con el Gran Premio de la iniciativa Los Búlgaros Dignos. La compañía de software de Emilián Kadíyski lidera la lista de compañías más recomendadas en Europa del Este el año 2020, según la clasificación establecida por la plataforma de valoraciones y reseñas Clutch. Los miembros del equipo de programadores están sopesando formas para trabajar asimismo en otras regiones de Bulgaria, manteniendo el mismo concepto, pero extendiendo el abanico de profesiones y el alcance geográfico.

En el territorio de Vratsa funciona además MindHub, una red innovadora de academias de programación para niños y adolescentes.

”La actividad se proyecta a los niños y adolescentes de 6 a 15 años de edad que pueden aprender los conceptos básicos de la programación, gracias a los cuales se desarrollan el pensamiento lógico y analítico –comenta Dorotea Vládova, mentora de la Academia– . Cuando noto progreso, cuando los padres están contentos y los niños se impacientan por acometer una nueva ocupación, compruebo que he hecho bien mi trabajo. Esto me motiva a no cesar de trabajar. El entusiasmo que late en los niños es importante para al porvenir de los jóvenes en Vratsa”.

A los ojos de Iván Strizhlev, su Vratsa natal parece más joven que nunca:

”A mí me importaba ocuparme de lo que había estudiado, de lo que me gusta –destaca Iván, que se ocupa de cursos de entrenamientos y de formación de equipos– . Casi inmediatamente después de concluir mis estudios universitarios, decidí quedarme en Vratsa. Se nota un cambio en la ciudad, no sólo hay un mayor número de jóvenes, sino que se están desarrollando la infraestructura y la vida social. No es lo que era unos años atrás. Vratsa es un territorio para gente a la que le agrada un estilo diferente del estilo dinámico de la capital. Es un lugar apropiado para formar una familia y criar hijos. En la actualidad existen asimismo mayores oportunidades para el desarrollo de uno”.

Tijomir Mashov es otro joven de Vratsa que ha decidido desarrollarse en la mayor ciudad del noroeste de Bulgaria.

”Me he quedado y seguiré acá porque creo que nuestra región tiene un potencial que depende de nosotros. Hay que dejar se justificarse con los demás. Cuando uno quiere trabajar, lo hace en cualquier parte. Creo que cada vez mayor número de personas retornará a su terruño. El noroeste de Bulgaria volverá a desplegar su potencial para ser lo que siempre ha sido en la historia: uno de los factores para el desarrollo. Yo lo creo y veo a los jóvenes que también lo creen”.

Adaptado por Darina Grigórova en base a entrevistas de la emisora regional de Radio Nacional de Bulgaria en Vidin

Versión en español por Mijail Mijailov

Fotos: BGNES, BTA, hack.vratsa.net