“Las negociaciones con la Comisión Europea continúan. No podemos sustituir una fuente búlgara independiente, como es el carbón de la cuenca hullera Maritsa Este, por una fuente importada y construir en su zona centrales de vapor y gas. Aumentar nuestra dependencia del gas significa que alguien otro ponga y frene la electricidad en el país”, ha manifestado en la sesión de control parlamentario Asén Vasilev, viceprimer ministro y titular de Hacienda de Bulgaria.

En las negociaciones con la Comisión Europea se está examinando sustituir el carbón por una utilización de residuos. De este modo, la planta de incineración de residuos, basada en la tecnología más avanzada, podría construirse en la zona de Maritsa Este en vez de ubicarse en el centro de Sofía.