El baile en barra es un deporte que últimamente va cobrando mucha popularidad en Bulgaria, gracias a diversas manifestaciones organizadas en el espacio público. En el país van abriendo sus puertas cada vez mayor número de salas de acrobacia aérea y vertical. Las más numerosas se encuentran en Sofía. En algunos lugares se hacen exhibiciones gratuitas de baile en barra, aros aéreos y velos. Hay incuso sesiones de entrenamiento destinadas exclusivamente a menores de edad. Bulgaria ha sido asimismo país anfitrión de competiciones, la última de las cuales tuvo lugar en junio de 2019.

“Ciertamente, el baile en barra se está volviendo cada vez más popular en Bulgaria -dice Bahrie Yusein, instructora de baile en barra-. Mucha gente viene a hacer un ensayo y trae también a amigos. Así se va difundiendo la noticia de que una tal modalidad deportiva sí existe y que no es estriptis y que tampoco es destinada únicamente a las mujeres. La gente ha ido dándose cuenta de los creativo y forzudo que es este deporte. Estas ideas están siendo reforzadas también por las actuaciones de entrenadores nuestros y de personas que se entrenan en el marco de diferentes eventos divulgados por las redes sociales”.

Esta modalidad deportiva se remonta al siglo XII, cuando en China numerosos acróbatas ejecutaban complejos trucos en postes verticales de 9 metros. Mucho más tarde, en los años 20 del siglo XX, esta manifestación llegó a cobrar connotaciones eróticas y se le calificó de estriptis. Hoy en día el baile en barra lleva incorporados elementos deportivos y dancísticos y constituye uno de los entrenamientos predilectos para mantenerse en forma.

En Bulgaria, sin embargo, aún persisten determinados estereotipos asociados a este deporte, a pesar del interés incrementado por los entrenamientos:

“Antes la gente tenía sus prejuicios de que el baile en barra era un baile erótico y que se relacionaba con el estriptis -dice Bahrie-. Ahora ya no es así. Lo que actualmente persiste como estereotipo es que se trata de un deporte sólo para mujeres, que uno ha detener gran flexibilidad corpórea para practicarlo, que hay que ir fuerte a la sala para hacer todo tipo de ejercicios. Muchas personas dicen: ”No tengo fuerza en los brazos”, ”Ya no tengo la edad para hacer esto”, “Soy un hombre y este es un deporte femenino”. Todo esto frena sus deseos de intentarlo”.

“Esto no tiene nada que ver con el estriptis, uno es acróbata y no se desnuda. Lo que necesita para entrenarse es tener desnudas tres áreas determinadas del cuerpo”, dice tajante Dorotea Yáneva, quien lleva dos años dedicada en forma activa a la práctica de este deporte. Y agrega:

“El baile en barra permite que uno cultive en sí la tenacidad, una terquedad muy importante y consiga, en conjunto, un desarrollo de su personalidad ya que esta práctica le exige a uno sobreponerse a sí mismo en todas las formas posibles”.

La verdad es que para el baile en barra no se requiere una preparación física previa ni que uno tenga unas habilidades especiales. Cualquier persona puede entrenar, indistintamente de su género y años de edad. La fuerza física y la flexibilidad se van obteniendo con el tiempo. Lo único que hay que tener es valentía y deseo para iniciarse y luego ser perseverante para evolucionar. El mayor reto es conseguir abandonar los recelos, coinciden en opinar Behrie y Dorotea.

Adaptado por Kristina Abadzhíeva

Versión en español por Mijail Mijailov