El sirio Omar de 15 años de edad que conducía el autobús con inmigrantes que mató a dos agentes de policía en Burgas el pasado jueves, quedará bajo custodia, según dictó el tribunal regional en esta ciudad costera. El fiscal, Dimitar Uzunov, declaró que insistiría por la sentencia más dura, ya que se trata de delito intencional grave, punible con 15 a 20 años de prisión o cadena perpetua.

El acusado declaró ante el tribunal que vio el coche policial en el último momento e intentó frenar pero los frenos no funcionaron. Se declaró culpable pero agregó que el crimen no fue intencional y pidió ser liberado de la prisión preventiva.

Omar no tiene documentos personales y su identidad se estableció a base de los datos que declaró él mismo. Si se comprueba que es menor de edad, enfrentará hasta 10 años de prisión. El sirio había confesado a su abogado oficial, Plamen Kunev, que el organizador del tráfico de personas estaba ubicado en Turquía. Hasta el momento no hay datos de búlgaros que hubieran cooperado.