Rusia trata de influir directamente en los procesos del sector energético y en las elecciones, y la propaganda se desarrolla a través de los medios de comunicación y de una serie de organizaciones. Así lo afirma el informe de 2021 de la Agencia Estatal de Seguridad Nacional (el servicio de contraespionaje, DANS en sus siglas en búlgaro), aprobado por el Gobierno interino. 

Según el documento, la modernización del ejército búlgaro también ha sido observada de cerca por agentes del Kremlin. DANS también informa que se han cortado las actividades de un grupo de búlgaros que estaban realizando espionaje a favor de Rusia, así como de ciudadanos rusos relacionados con los servicios especiales de su país. 

En el informe la invasión de Ucrania se califica como “agresión sin precedentes en el territorio de Europa desde la Segunda Guerra Mundial” contiene la constatación de que la presión migratoria hacia Bulgaria se ha triplicado en tan solo un año.