El presidente, Rumen Radev, describió el asesinato de un policía fronterizo búlgaro como algo sin precedentes, luego de que un oficial uniformado búlgaro fuera baleado desde el territorio del país vecino. El jefe de Estado búlgaro espera que el Ministerio de Exteriores convoque al embajador turco para una explicación y que el caso sea investigado conjuntamente por los dos países.

El grupo que disparó contra la patrulla búlgara se retiró al interior de Turquía, dijo el ministro interino del Interior, Ivan Demerdzhiev. "Los colegas turcos nos aseguraron que harán todo lo posible y que estas personas deben ser encontradas y llevadas ante la justicia", dijo Deremdzhiev.

La valla a lo largo de la frontera con Turquía tiene agujeros y no es fiable. Necesitamos un muro de hormigón de tres metros de altura, dijo ante bTV el ministro interino de Defensa, Dimitar Stoyanov.