La Presentación de la Virgen María es una de las doce principales fiestas cristianas celebradas tanto por la Iglesia ortodoxa como por la católica el 21 de noviembre. La Iglesia ortodoxa búlgara la celebra de manera especialmente solemne como el Día de la familia y la juventud cristianas por lo que también se encuentra entre las fiestas familiares de invierno más veneradas en Bulgaria, en la que los miembros de la familia van juntos a la misa.

La visita en familia a la iglesia simboliza la entrada al templo de la futura madre de Dios - la pequeña María de tres años - y recuerda a los padres sus obligaciones espirituales con sus hijos.

“Según las enseñanzas de Cristo, la familia es comparada con la Iglesia, como una versión suya en tamaño reducido”, señala en una entrevista para Radio Bulgaria el padre Bozhidar Marinov, de la iglesia "Exaltación de la Santa Cruz", en Sofía.

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¿Cuáles son los desafíos a los que se enfrenta la familia cristiana de hoy, cuando la esperanza para un mundo mejor se encuentra retrocediendo frente a la incertidumbre?

"Hay muchas opiniones sobre la vida familiar, pero la familia cristiana tiene como modelo el plan divino”, cuenta el padre Bozhidar. “El amor de Dios por los miembros de la iglesia, es como el amor entre los cónyuges y el matrimonio es llamado por el apóstol Pablo un gran misterio”.

Una familia es cristiana en la medida en que se acerca o coincide con este plan divino, lo que significa que los dos cónyuges han de ser una sola carne. Esta es la idea cristiana del matrimonio que se basa en la idea de que el hombre y la mujer deben ser vistos como un solo organismo, como una unión única a todos los niveles que les haga sentir plenos y suficientes el uno para el otro. Por eso mismo, cuando realizamos el Sacramento del Matrimonio, decimos al final que en adelante los recién casados ​​pasan a ser una sola persona, una sola carne. Es importante recordar y saber que lo que se planta hoy, será lo que cosechará en los años venideros".

En la tradición ortodoxa, los padres tienen la ardua tarea familiar de criar a sus hijos, enseñándoles a distinguir el bien del mal - pero también de introducirles en los valores cristianos:

“Como hijos de Adán y Eva, todos estamos engendrados con una atracción pecaminosa pero, por otro lado, nuestra sangre está engendrada con la sangre de Cristo en la Sagrada Comunión”, explica el padre Bozhidar. “Esto sucede cuando todos los padres y los niños participan juntos en la comunión. Así es como aprenden los niños, y por eso llamamos a esta festividad el Día de la Familia y la Juventud cristianas. Porque en el rostro de los santos Joaquín y Ana, y de su hija la Santísima Virgen María, vemos el ideal de una familia que posee todos los valores morales y una plena dedicación a la voluntad de Dios. La oración, la humildad, la obediencia: esto es la familia cristiana. Una comunidad de dos esposos que son uno junto con los hijos,  a la vez que todos ellos son uno con Cristo".

En la parroquia del templo "Exaltación de la Santa Cruz del Señor", los sacerdotes prestan especial atención a los jóvenes y a las familias jóvenes. Según el padre Bozhidar, cuando una familia se ha educado en el espíritu de la Iglesia ortodoxa, vive una vida más tranquila, más dinámica y ordenada. Todos los miembros de la familia aprenden a ayunar, a vivir respetando el calendario de la iglesia, a celebrar sus días festivos, y esto trae orden a sus vidas.

"Esto es vivir en plenitud", señala el padre Bozhidar. “No es casualidad que en la Antigüedad, tanto el matrimonio como el bautismo formaban parte de la Santa Liturgia, de modo que cuando dos jóvenes se casaban y nacía un niño, éste pudiera ser bautizado. De esta manera, toda la Iglesia lo reconoce como hijo propio, y los cónyuges y el niño tienen la oportunidad de conocer por su parte la comunidad eclesiástica. Esto es muy importante para nosotros. Y, gracias a Dios, nuestra iglesia se llena cada domingo de jóvenes y de niños que toman la comunión".

Autor: Darina Grigorova

Versión en español: Alena Markova

Fotos: vazdvijenie.bg, Darina Grigorova, BTA