Los bibliotecarios, apoyados por los sindicatos, protestaron hoy en frente de la Biblioteca Municipal de Sofía reclamando un aumento salarial.

Tras la última decisión del Consejo de Ministros, aquellos que trabajan en el campo de los servicios informativos y bibliográficos obtendrían un aumento salarial de tal sólo un 5%. Según los manifestantes, los fondos asignados no están destinados únicamente a sus sueldos, sino también al mantenimiento del propio instituto. En la Biblioteca Municipal de la capital un empleado con Master universitario cobra actualmente unos 1400 levas (700 euros) de sueldo medio. Por eso, el día en que la Biblioteca Municipal celebra su fiesta profesional - 11 de mayo, Día del Bibliotecario -, los empleados llevarán lazos de protesta en la solapa.

La reivindicación de los trabajadores de la biblioteca es que el salario mínimo no sea inferior a 1.800 levas (900 euros). Kiril Binev, presidente de la Federación "Cultura" adjunta a la Confederación Laboral "Podkrepa", comenta que el número de trabajadores de las bibliotecas es insignificante desde un punto de vista electoral, por lo que el Gobierno no cuenta con su voto y se justifica con un déficit presupuestario. Pero, en sus palabras, los bibliotecarios no han contribuido de ninguna manera a este déficit  para ser "castigados" con unos salarios bajos. 

• Jornada de puertas abiertas en la Biblioteca Municipal de Sofía por el Día del Bibliotecario