Quizás soy anticuado, pero creo firmemente en la democracia con mi propuesta de celebrar un referéndum sobre la introducción del euro en Bulgaria. Algunos dirigentes creen en la tecnocracia, otros en la fuerza motriz de la economía. Pero si no hay democracia, toda la construcción social está condenada al fracaso. Esto es lo que dijo el presidente Rumen Radev a Richard Quest de CNN después de la inauguración del Foro Internacional de Inversiones de Tashkent.

No hay ni puede haber una crisis constitucional por el rechazo del referéndum. Sin embargo, esto socavará el contrato social entre el gobierno y los ciudadanos búlgaros, afirma también el presidente.

Aún no ha pasado el momento de celebrar un referéndum sobre la introducción del euro en Bulgaria. Los procesos son extremadamente dinámicos y todo cambia muy rápidamente, incluso dentro de la propia UE. Un indicador de ello es la salida de Gran Bretaña de la unión, añadió el presidente, citado por la oficina de prensa de la institución presidencial.

"A medio y largo plazo, se espera que el euro traiga beneficios a la economía búlgara, pero la falta de consenso en nuestra sociedad no se refiere al camino europeo del país, sino a si Bulgaria está preparada para introducir el euro en 2026", afirmó Radev en una entrevista, citada por BTA.

Redactor Ivo Ivanov 

Tradcido y publicado por Vladislav Púnchev

Foto: president.bg