“Es una insolente mentira el que el contrato con la empresa estatal turca Botas no se esté empleando”. Estas fueron las palabras del presidente Rumen Radev ante los periodistas en la base aérea de Krumovo. La terminal de Alejandrópolis lleva sin funcionar desde el año pasado, por lo que este año están entrando cantidades significativas de gas a través del contrato con Botas, señaló el presidente y pidió que los investigadores comprobaran también si hay beneficios perdidos. Radev también dijo que en Bulgaria se estaba importando gas ruso a través de intermediarios. Él ha tenido conversaciones con el presidente turco Recep Erdogan, "que está dispuesto a ofrecer condiciones aún mejores en esta situación". 

"Definitivamente creo que el ataque contra el gobierno provisional por el contrato Botas tiene motivos políticos y también va dirigido contra mí. El contrato no se está utilizando de la mejor manera para importar gas en Bulgaria, ni para vender estas capacidades fuera del país, y tampoco están dándose negociaciones en esta situación", añadió Radev.

Redactor: Miglena Ivanova

Traducción en español y publicación: A. Markova

Foto: BTA