Los pasajeros que salen del aeropuerto de Fiumicino y se encaminan a Roma pueden apreciar una bella estatua de Leonardo da Vinci. Cada día miles de turistas que se dirigen a la ciudad eterna pasan  cerca de esta majestuosa obra en la capital italiana. ¿Han oído alguna vez que la exquisita escultura que los recibe en el aeropuerto fue creada por el escultor búlgaro Asen Peykov?

Si nos basamos en la última encuesta de Radio Bulgaria, la respuesta sería positiva. Resulta que los usuarios de la página de idioma griego son los mejor informados, ya que el 61% de ellos señalaron el nombre del escultor búlgaro que elaboró la estatua de Leonardo de Vinci en el aeropuerto italiano de Fiumicino. Con excepción de los usuarios de la página en turco, que han colocado el nombre de Asen Peikov en el último lugar entre los cinco nombres citados, el resto de nuestros usuarios han señalado el del escultor búlgaro.

La fama de Asen Peykov, nacido en Sofía en 1908, supera las fronteras no solo de Bulgaria e Italia, sino de Europa. Se graduó con medalla de oro por la Academia Nacional de Bellas Artes de Sofía, en la clase del escultor Prof. Andrey Nikolov. A los 30 años de edad abandonó la patria y se asentó en Italia donde se convirtió en una de las figuras clave de la escultura italiana.

En los años 40, Asen Peykov había conquistado un digno lugar en la vida artística de Roma. En aquel entonces trabajaba en un taller en la más lujosa calle de Roma, Via Margutta, y formaba parte de la compañía de estrellas de escala mundial como Vittorio De Sica, Federico Fellini y Ava Gardner. 

El artista convirtió el retrato en tema central de su arte y en sus manos cobraron vida personalidades históricas de un amplio periodo histórico comenzando por Mozart, pasando por el kan Asparuj, Alexander Fleming y Sofía Loren. En los años 50 y 60 era uno de los creadores de retratos escultóricos más demandados y apreciados en Italia. Más de mil de sus obras se encuentran en galerías en EE.UU., Europa y América del Sur.

La gigantesca estatua de bronce de Leonardo de Vinci que el búlgaro elaboró después de haber ganado un concurso del ayuntamiento de Roma fue inaugurada el 19 de agosto de 1960. Asen Peykov colocó al genio renacentista en una pedestal con una mano indicando al cielo y la otra sosteniendo un tornillo aéreo, una de invenciones de Leonardo Da Vinci.

Lamentablemente, el escultor respetado en toda Italia no gozó de fama y reconocimiento en su patria. En 1969 un proyecto suyo del kan búlgaro Asparuj fue condecorado con un premio de incentivo por el jurado búlgaro.

Después de una vida artística que se expandió en más de tres decenios Asen Peikov abandonó este mundo en 1973 en el país que valoró su talento.

Hoy una plaza en Roma lleva el nombre de Asen Peikov y obras suyas pueden ser vistas en 16 ciudades italianas. A pesar de que la fama de la antigua Via Margutta ha quedado atrás en el tiempo, allí todavía se encuentra el taller del búlgaro con algunas de sus esculturas que se han conservado gracias a su hijo Rodolfo. 

Cuando los búlgaros visitan la famosa cafetería Caffé Greco en Via Condotti, que desde hace más de un siglo es lugar de reunión de poetas, pintores y músicos, se sorprenden por el hecho de que hay un bajo relieve de Asen Peikov y un pequeño cuadro rojo de su hermano Iliya, el pintor que vio el Universo. Hay una historia muy curiosa relacionada con él.

Cuando Yuri Gagarin regresó de su viaje espacial, creía que era la única persona que había visto el universo. “No es posible plasmar en el lienzo lo que se ve en realidad”, exclamó Gagarin viendo los cuadros cósmicos de Iliya Peykov.

Pronto Radio Bulgaria contará en sus páginas la historia de este pintor visionario. Antes de esto les invitamos a que participen en nuestra nueva encuesta en que les preguntamos ¿Quién implementó la práctica de salud espiritual y física Paneuritmia difundida por el mundo entero?

Versión al español de Hristina Táseva